martes, 13 de abril de 2010

¿Dónde encontrarte?

A un lugar muy muy lejano quería huir un soñador peculiar...

En un lugar muy muy borroso vivía el soñador peculiar...

Y un día

y otro día

pasaba

sin irse

y sin quedarse...

viernes, 5 de febrero de 2010

Esa historia tengo que escribirla...


Y así han pasado varios meses…

como aquél que dice “ese viaje algún día lo haré”, o esa película tengo que ir a verla, o ese sueño mañana lo cumpliré…

como aquél que rezagado de su propia vida no se da cuenta que todo lo está posponiendo, que no vive, que sólo espera que llegue el día, que no llega, de hacer aquello que le acerca a instantes felices…

jueves, 30 de julio de 2009

"Medias tintas"

Sobre tu cabeza un sol cegador. No hay señales en el cielo. Bajas la mirada hasta tus pies. Observas tus pasos atento a no tropezar.

Y ahí está. Acabas de golpearte la cabeza con la señal de curva peligrosa. Ten cuidado al caminar por los arcenes...

lunes, 22 de junio de 2009

Ni el cielo tiene límites...

Cuando la imaginación camina impulsada por los sueños
...
Cuando laten hormigas en las puntas de los pies
...
Cuando vuelves una y otra vez a un lugar diferente al que sabes llamar hogar...

viernes, 9 de enero de 2009

(Re)Inventando cada momento

Continuemos... mientras el mundo parece destruirse en cada imagen.

Continuemos... intentando colorear la realidad que nos dejan, difuminando los bordes con plastilina para que no duela.

Continuemos... sintiendo que cada instante es nuestro, que no tuyo, o suyo, o mio.

Los muertos saben que el show debe continuar. Los vivos hemos olvidado que sabemos bailar.

Continuemos...

domingo, 14 de diciembre de 2008

"Ocho galletas con la puerta abierta"

Sentado en la cocina desayunaba leyendo el periódico. Distraído iba cogiendo las galletas de dos en dos hasta ingerir un total de ocho (manías de niño...) Cada mañana, cada desayuno durante años, sin necesidad de contarlas.

Sentado en la cocina desayunaba leyendo el periódico. Entre página y página levantaba la vista. Al otro lado de la puerta abierta la vida comenzaba, continuaba, terminaba. Cada mañana, cada comida durante años la puerta tenía que permanecer abierta (manías de viejo...)

El azar vino a sentarse un desayuno junto a él. Acompañado de una burlona corriente de aire cerró la puerta de un golpe. Le observó divertido.

Sentado en la cocina, frente a una puerta cerrada no supo qué hacer. Ya se disponía a apurar el último trago de café, cerrar el periódico e irse a trabajar cuando una sonrisa se detuvo en sus ojos...

Alargó la mano y cogió una novena galleta.

viernes, 14 de noviembre de 2008

No recuerdo dónde perdí tus huellas...

... quizá desandaron el camino que las llevó hasta mí...

... quizá se perdieron jugando entre retazos de nubes...

... quizá olvidaron que las miguitas de pan se las comen los pájaros...

... quizá, quieta, asustada, esperas que vuelva a por ti...