miércoles, 30 de julio de 2008

Cerca

No te busques más allá del punto y a parte. Te habrías dado cuenta de que tu vida ha cambiado de renglón. No es eso lo que necesitas, aunque creas que empezar de nuevo es mucho más sencillo que continuar.

¿Desde dónde partir sino es desde ti mismo?

Eres una encrucijada donde tus pasos se han parado pero tus pies andan...



viernes, 18 de julio de 2008

Escuchar(te)

No importa que no entiendas por qué suceden las cosas.

No importa que no encuentres el lugar donde colocarlas en tu vida. En ocasiones simplemente encajan donde deben hacerlo.

La confusión sólo es ruido. Tu respiración... viento que acaricia las respuestas. Tu piel... tu alma.

Mira de frente. Eres todo lo que necesitas...



lunes, 14 de julio de 2008

No más ingenuidad

No va a aparecer nadie a la vuelta de la esquina que te diga qué hacer, qué sentir, cómo vivir... o tal vez si. Escoge qué quieres.

Estás solo. Nadie se ha ofrecido a acompañarte... ¿Y sabes una cosa? Nadie va a hacerlo. Porque hay otras vidas a parte de la tuya, porque cada uno ve sus pies y pocas veces levanta la mirada del suelo.

En ocasiones, como algo parecido a un descuido, sentirás el roce de una mano sobre el envés de la tuya... ¿Alguien ? Busca el ser al que pertenece... el valor es cosa de dos.


lunes, 7 de julio de 2008

"Si no fuera por estos momentos..."

Una terraza junto a la carretera de paso de un pueblo del que no importa el nombre. Has aparecido ahí porque sí, porque así lo pidió el momento, porque así lo pediste tú. Miras los coches que pasan ocasionalmente de forma indiferente, no te importa dónde van. Tú estás aquí, compartes cañas y aceitunas negras (que no te gustan), y no vas a ningún sitio. Sólo quieres quedarte, un ratito más, junto a su corazón... y el cielo ha ido cambiando de color... y sabes que tendréis que iros, que ya llegaís tarde al cumpleaños... y sabes que habrá otros pueblos, otras terrazas, junto a carreteras en kilómetros encontrados... y sabes que volverás a ver la luz transformándose en el cielo, jugando con las nubes... junto a su corazón.

Una terraza junto a un río que sólo fluye de un pueblo del que no importa el nombre. Has aparecido ahí porque sí, porque así lo pidió el momento, porque así lo pediste tú. Y pasa el agua... y cinco patos y un pelícano que no sabe qué hace aquí... y te sumerjes en recuerdos ajenos... y encuentras los tuyos entre imágenes y palabras... y dos niños limpian el río de una corriente que no cesa... y desconocidos se suceden por el camino mientras inventáis historias de sus vidas que sólo duran unos segundos en las propias... y sabes que volverás a ver la luz transformándose en el agua... y patos... y un pelícano que sigue sin saber qué hace aquí... y sabes que volveréis a inventar instantes porque os encanta jugar.

La mesa de siempre en el mismo bar con nombre de recuerdo. Has aparecido ahí porque sí, porque así lo pidió el momento, porque así lo pediste tú. Dos que son uno y sin embargo dos frente a ti. Miradas, palabras, cuentos que nos permiten ser lo que soñamos. No puedes evitar amarles por cómo son, porque te llevan a lugares que quisiste dejar atrás (y te cogen de la mano y acarician tus dedos y tu alma con mil sonrisas y una mirada). Y sabes que volverás junto a ellos... y sabes que habrá otras historias que contar, otros caminos con dos que son uno, otros sueños por los que quedarse...

Y sabes que siempre habrá momentos...


martes, 1 de julio de 2008

Noches de domingo

No había vuelto a pensar en ello, pero tú sí. "Mientras veíamos la peli he recordado aquellas noches de domingo, ¿te acuerdas? Cena en El Perrito y cine"...

Sí, recuerdo. La misma mesa junto a la columna parecía mantenerse libre esperandonos... las mismas pizzas que casi no teníamos ni que pedir... los mismos sueños discutidos una y otra vez, buscando el camino para llegar a ellos...

Y ahora los mismos ojos interrogantes se cruzan, ¿sólo hemos cambiado de escenario?

No, hemos seguido el camino que intuíamos delante... hemos dejado algunos sueños atrás... hemos dormido con otros y despertado solas... y acompañadas. Hemos buscado la mirada de la otra y no estaba... y no hemos dejado de soñarla...

Hemos cambiado... pero no olvidado cómo amarnos.